El presidente Nicolás Maduro, vestido de uniforme, ha advertido que está preparado para pasar “a una etapa armada y planificada con todo el pueblo” si Venezuela es atacada militarmente. La declaración la ha hecho al cierre de una nueva jornada de movilización convocada para este viernes, a la que fueron convocados 8,2 millones de nuevos alistados y 4,5 millones de milicianos con los que el chavismo asegura que cuenta. Sin embargo, también ha habido un momento para tender la mano: “Respeto a Trump, lo invito a dialogar. Ojalá recapacite”. Lo que hizo, como en días anteriores, fue culpar a Marco Rubio, el secretario de Estado, al que aludió de forma indirecta al decir que hay funciones que “quieren mancharle de sangre las manos”.